................. |
HUMANOIDES SIN PRESENCIA OVNI
"Tenía
el aspecto de una chica de unos 18 años y poco más
de un metro de altura. Llevaba el pelo recogido y por debajo
de la cabeza tenía un manto de color turquesa claro.
La mujer voladora se acercó manteniendo su altura,
y al pasar junto a Manuel y Erminda, giró la cabeza
hacia ellos, aunque nada dijo"
|
Humanoide
observado por Evaristo fandiño en Conil en 1983
|
Carlos Fernández
Con
cierta frecuencia nos encontramos con casos donde
los testigos aseguran haber visto seres que no parecen humanos, con
características físicas similares a las que presentan
los tripulantes de OVNIs, pero sin embargo no hay avistamientos de luces
ni ningún objeto volante. ¿Tienen estos casos el mismo
origen? ¿Que relación tienen con el fenómeno OVNI?
¿Es parte de la puesta en escena que presenta el fenómeno?
Antes de aventurar hipótesis, repasemos algunos casos que nos
pondrán en situación sobre este fenómeno.
DOS
SERES EN LA FUENTE
Julio F. es un emigrante español, que a muy corta edad
tuvo que viajar a Argentina, empujado por las circunstancias de aqulla
época. Prefiere mantener su identidad en reserva, debido a lo
atípico de la experiencia que le tocó presenciar cuando
contaba con solo trece años de edad.
En 1945, Julio vivía junto con sus padres en una casa
situada en las afueras de la ciudad de Vigo (Pontevedra-España).
A pesar de encontrarse en el extrarradio de Vigo, el barrio de Lavadores
ya tenía por aquel entonces un aspecto típicamente urbano.
Junto
a su casa, había situada una fuente de uso público, donde
los vecinos de este barrio iban a buscar agua fresca o a lavar la ropa.
Esta fuente está ubicada junto a la calle, dentro de un pequeño
recinto al que se accede por una entrada sin puerta. En el interior
está acondicionado un pequeño lavadero ubicado en la parte
central.
Por encargo de su madre, y como tantas otras veces lo había hecho,
Julio fue a buscar agua a esta fuente por la mañana. Apenas cruzó
la entrada, vio algo que le djó atónito, hasta tal punto
que soltó de su mano el recipiente que llevaba. En la parte de
atrás del lavadero había dos seres extrañamente
vestidos, que hablaban entre si. Uno de ellos, el que estaba situado
en la parte más interior, señalaba algo con su mano
derecha extendida. Tenía el pelo muy largo y una tímida
barba; y estaba vestido con una túnica, que a Julio le hizo
recordar a "Jesucristo". Por el contrario, el otro
estaba completamente calvo, y aunque también estaba vestido
con una especie de túnica, le resaltaban aun más sus ojos.
Como en tantos casos de observaciones de humanoides relacionados con
OVNIs, estos tenían grandes ojos rasgados hacia atrás.
Julio quedó paralizado por la situación, y los seres,
ante la presencia de Julio, murmuraron algo así como "no
importa, es un niño". Acto seguido se esfumaron sin
moverse de su sitio.
Presa del miedo, Julio volvió a casa sin el agua que su
madre le había encargado, y aun tardó algún tiempo
en volver a aquella fuente, por el impacto que le produjo aquella observación.
Años después, Julio le dio una interpretación casi
religiosa, por el parecido de uno de los seres con la imagen popular
de Jesús, y por ser en aquellas fechas la única referencia
de explicación para sucesos de estas características.
Sin embargo, y aunque está convencido de la realidad de su experiencia,
este suceso no marco su vida ni produjo cambios en su forma de enfrentar
y entender la vida.
Pero no a todos le ocurre lo mismo...
UNA
"VIRGEN" VOLADORA NO IDENTIFICADA
Enmascarados tras la imagen de una veneración
religiosa o de un suceso interpretado como sobrenatural y piadoso, se
encuentran muchas veces casos de observaciones de humanoides que hoy
en día interpretariamos desde otro punto de vista. En Gaceta
OVNI ya hemos tratado el caso de Fátima
donde estas cuestiones son bien evidentes.
Esta interpretación religiosa del fenómeno es comprensible
en 1945, cuando aun no se hablaba de OVNIs, pero tambien en 1955
para un pastor de la Sierra de Avión (Orense-España),
para quien las noticias de los platillos volantes aun no habían
llegado. Solo habían llegado los fenómenos.
Manuel González Vázquez vive en una pequeña
aldea llamada Cortegazas, como lo hacía 46 años
atrás. Quedó grabada en su memoria la fecha del 20
de octubre de 1955, cuando se encontraba apacentando su ganado en
un lugar llamado Portela de Pau. Estaba atardeciendo, y Manuel
se encontraba en compañía de su vecina Erminda, muy devota
de las costumbres cristianas.
Lo primero que sintieron fue un temblor que duró algunois minutos,
que les produjo un cierto recelo. Momentos después vieron a lo
lejos una figura indefinida, "como una pantalla" y
que tenía indiscutiblemente forma humana. Sin embargo, segundos
después vieron otra figura que se acercaba volando por debajo
de las nubes. A medida que se acercaba pudieron comprobar que se trataba
de una mujer, que se acercaba a ellos, y que volaba manteniendo una
altura de unos tres metros.
Tenía el aspecto de una chica de unos 18 años y poco más
de un metro de altura. Llevaba
el pelo recogido y por debajo de la cabeza tenía un manto de
color turquesa claro. La mujer voladora se acercó manteniendo
su altura, y al pasar junto a Manuel y Erminda, giró la cabeza
hacia ellos, aunque nada dijo.
La aparición duró aproximadamente una media hora y fue
interpretada por ambos como una señal divina, donde se habría
aparecido la Virgen María. El contexto religioso de aquella
época condicionó la interpretación de Manuel, que
dedicó toda su vida al cuidado de la Iglesia de su pueblo y a
la devoción cristiana.
LOS
HUMANOIDES YA HABRÍAN ESTADO EN CONIL
Hemos citado dos casos antiguos porque tienen ese ingrediente de frescura
que roza la inocencia, muy propia de los testigos de aquellas datas.
Vayamos ahora a épocas más recientes para retomar el hilo
de este tema.
Evaristo Fandiño se encontraba de vacaciones en la localidad
gaditana de Conil en septiembre de 1982. Una noche en
que la marea estaba baja decidió dar un paseo por la playa, que
se encontraba completamente a oscuras. A la distancia vio como unas
figuras muy altas, que en una primera apreciación les pareció
que eran personas que estaban montando a caballo. Desde la distancia,
le pareció que tenían unas capas brillantes que reflejaban
los pocos destellos que se dejaban ver por la playa. En un primer momento
le pareció que estas figuras se le acercaban, pero cuando el
comenzó a avanzar hacia ellos, le dio la impresión de
que se alejaban. Evaristo apuró el paso y llegó a acercarse
a tan solo 15 metros de aquellas figuras. Allí comprobó
que no eran jinetes a caballo, sino que se trataba de unas figuras estilizadas
de casi cuatro metros de alto. Tenían sobre la cabeza
una especie de corona,que terminaban en puntas hacia arriba.
Evaristo no quiso
avanzar más por temor a lo que pudiera ser aquello, y los "jinetes"
se perdieron en la oscuridad de la playa.
Años
después, en 1989, la playa de Conil de la Frontera fue
escenario de otro suceso relacionado con humanoides donde dos seres
muy altos son los protagonistas de un incidente que hizo correr ríos
de tinta en la ufología hispana, convirtiendose en uno de los
casos de humanoides más famosos de España.
En estos
casos que hemos relatado, podemos comprobar que muchos tienen muchos
de los ingredientes típicos de los encuentros con tripulantes
de OVNIs: La interacción con el testigo, su naturaleza poco humana
y otros detalles propios de sestos encuentros. De todos modos, cada
caso merece una evaluación independiente.
El tiempo
y la investigación desapasionada se encargarán de traer
las respuestas
|